La colaboración entre agencias inmobiliarias es un tema que ha cobrado gran relevancia en los últimos años. Este tipo de colaboración ha dado lugar al concepto de "inmuebles compartidos", una estrategia en la que las agencias comparten sus propiedades en beneficio mutuo. ¿Por qué competir cuando puedes colaborar? En este artículo vamos a profundizar en este concepto, entender sus ventajas, desventajas y cómo funciona en la práctica.
Los inmuebles compartidos son propiedades que se gestionan y promocionan entre varias agencias inmobiliarias de manera conjunta. Este modelo de negocio permite que múltiples agencias puedan ofrecer los mismos inmuebles a sus respectivos clientes, logrando una mayor difusión y, potencialmente, una venta más rápida.
Es una estrategia donde todos ganan: las agencias aumentan su cartera de propiedades disponibles y los propietarios tienen más opciones para vender su inmueble en menos tiempo. Además, los compradores también se benefician, ya que tienen acceso a una mayor variedad de inmuebles.
El proceso es simple. Imagina que una agencia inmobiliaria tiene una propiedad, pero no logra encontrar al comprador ideal. En lugar de perder tiempo y dinero en una promoción unilateral, esta agencia decide compartir el inmueble con otras agencias. De esta forma, todas las agencias involucradas pueden mostrar la propiedad a sus clientes, aumentando exponencialmente las posibilidades de venta. Si se concreta la venta, las agencias comparten los honorarios de forma proporcional.
El propietario, por supuesto, es el dueño del inmueble y tiene la libertad de elegir si desea que su propiedad sea compartida entre varias agencias. En muchos casos, es una opción muy atractiva, ya que su inmueble obtiene una mayor visibilidad. Sin embargo, es crucial que el propietario esté de acuerdo con los términos de la colaboración y con la manera en la que se devengarán los honorarios.
Las ventajas de compartir inmuebles entre agencias son muchas, y es una estrategia que cada vez cobra más popularidad. Veamos algunas de las principales:
Mayor visibilidad del inmueble: Al compartir la propiedad con varias agencias, aumenta significativamente la exposición del inmueble a potenciales compradores.
Venta más rápida: Más agencias trabajando en una misma propiedad se traduce en más clientes interesados, lo que incrementa las probabilidades de cerrar la venta en menos tiempo.
Ampliación de la red de contactos: Las agencias involucradas pueden acceder a clientes que de otro modo no habrían llegado a conocer.
División del esfuerzo de marketing: Los costos y esfuerzos para promocionar el inmueble se reparten entre todas las agencias, lo que reduce el gasto para cada una.
Mayor profesionalismo: La colaboración entre agencias permite que el proceso de venta sea más organizado y profesional, generando más confianza en los clientes.
Uno de los beneficios más importantes para las agencias es la posibilidad de ampliar su cartera de inmuebles sin tener que captar nuevos clientes propietarios. Simplemente accediendo a inmuebles de otras agencias, pueden ofrecer más opciones a sus clientes compradores. Esto genera una situación en la que "más es más": a más opciones, más oportunidades de venta.
Aunque los beneficios son muchos, también existen algunos desafíos y desventajas que debemos considerar al compartir inmuebles:
Conflictos de intereses: Es posible que surjan roces entre las agencias a la hora de gestionar la propiedad, sobre todo si no se establecen reglas claras desde el inicio.
Diferencias en los honorarios : Cuando una propiedad es compartida entre varias agencias, los honorarios se reparten, lo que puede reducir los márgenes de ganancia para cada agencia.
Dependencia de otras agencias: Al compartir una propiedad, la agencia original depende en parte del esfuerzo de otras agencias para lograr la venta. Si alguna de las agencias no trabaja con suficiente dedicación, podría perjudicar el proceso de venta.
Problemas de comunicación: Mantener una buena comunicación entre varias agencias puede ser complicado, sobre todo si no hay un sistema de gestión eficiente.
Para que el sistema de inmuebles compartidos funcione de manera óptima, es fundamental contar con una estructura sólida y una serie de acuerdos previos que establezcan las bases de la colaboración.
Es vital que las agencias involucradas establezcan acuerdos claros desde el inicio. Esto incluye definir cómo se repartirán los honorarios, qué agencia se encargará de cada tarea (como la visita del inmueble o la firma del contrato) y cómo se manejará la relación con el propietario.
En el mundo inmobiliario actual, contar con la tecnología adecuada es clave para gestionar inmuebles compartidos. Existen sistemas de gestión de propiedades, como los CRMs inmobiliarios, que facilitan la colaboración entre agencias y permiten el seguimiento de cada transacción de manera eficiente. Aquí es donde entra Waytocol, nuestro CRM inmobiliario especializado, que permite a las agencias gestionar y compartir inmuebles de forma centralizada y sin complicaciones.
La comunicación es la piedra angular de cualquier colaboración exitosa. Es esencial que las agencias involucradas mantengan una comunicación fluida y transparente para evitar malentendidos y conflictos. Esto incluye tanto la comunicación con el propietario como entre las propias agencias.
Existen varios modelos de colaboración entre agencias inmobiliarias para gestionar inmuebles compartidos. Cada uno tiene sus propias características y es útil para diferentes situaciones.
En este modelo, las agencias pueden compartir sus inmuebles con otras agencias sin restricciones. Todas tienen acceso a la información del inmueble y pueden ofrecerlo a sus clientes. Los honorarios se reparte entre las agencias que logran la venta.
Aquí, solo un grupo selecto de agencias tiene acceso a la propiedad compartida. Este tipo de colaboración suele ser más controlada y permite un mejor seguimiento del proceso de venta.
En este modelo, la agencia que tiene la exclusiva de la propiedad permite que otras agencias también la ofrezcan, pero mantiene el control principal sobre la transacción. Es una mezcla entre la exclusiva tradicional y la colaboración abierta.
La tendencia de los inmuebles compartidos ha crecido en gran parte debido a la digitalización del mercado inmobiliario y la necesidad de las agencias de ser más eficientes en un mercado cada vez más competitivo. Compartir inmuebles es una forma de diversificar y aumentar las oportunidades de negocio sin tener que aumentar exponencialmente los costos.
El avance tecnológico ha jugado un papel crucial en la popularización de este modelo. Los CRMs inmobiliarios, como Waytocol, permiten que las agencias puedan gestionar inmuebles de forma más ágil y colaborativa. Además, la digitalización facilita que se puedan compartir propiedades de manera sencilla y rápida con otras agencias, lo que ahorra tiempo y reduce los errores.
No siempre es necesario compartir un inmueble. En algunos casos, si una agencia tiene una fuerte red de contactos y recursos de marketing, puede optar por gestionar la propiedad en exclusiva. Sin embargo, hay situaciones en las que compartir un inmueble es la mejor opción:
Propiedades difíciles de vender: Si una propiedad lleva tiempo en el mercado sin interés, compartirla puede ayudar a encontrar el comprador ideal.
Mercado saturado: En mercados inmobiliarios saturados, tener más ojos puestos en la propiedad puede marcar la diferencia.
Propietarios exigentes: Si el propietario desea vender rápido, compartir el inmueble con otras agencias puede acelerar el proceso.
La colaboración entre agencias ha demostrado ser una estrategia exitosa en muchos casos. Por ejemplo, en mercados inmobiliarios competitivos como el de Madrid o Barcelona, muchas agencias han logrado cerrar ventas más rápido y con mayor eficiencia al compartir propiedades.
En un caso específico, una agencia inmobiliaria en Sevilla logró vender un inmueble que llevaba un año en el mercado gracias a la colaboración con otras dos agencias que tenían una clientela diferente. Al compartir el inmueble, se logró una venta en solo dos semanas.
Si bien el modelo de inmuebles compartidos ofrece muchos beneficios, es importante tener en cuenta algunos aspectos para evitar posibles problemas.
Transparencia: Todas las agencias deben estar al tanto de los términos del acuerdo y cualquier cambio en el proceso de venta.
Documentación: Mantener un registro claro de todas las interacciones y acuerdos es crucial para evitar malentendidos.
Profesionalismo: Trabajar con agencias serias y profesionales asegura que el proceso sea fluido y efectivo.
La tendencia de los inmuebles compartidos parece ir en aumento, y todo apunta a que seguirá creciendo. La colaboración, la tecnología y el enfoque centrado en el cliente son factores clave que impulsarán esta tendencia en los próximos años.
La digitalización continuará facilitando la colaboración entre agencias, y los sistemas de gestión como Waytocol seguirán evolucionando para adaptarse a las nuevas necesidades del mercado.
En resumen, los inmuebles compartidos entre agencias inmobiliarias representan una excelente oportunidad para acelerar el proceso de venta, reducir los tiempos de inactividad y maximizar los beneficios tanto para las agencias como para los propietarios. La colaboración y el intercambio de propiedades no solo aumenta la visibilidad de los inmuebles, sino que también crea una red más fuerte y eficaz de profesionales inmobiliarios. Si se gestionan adecuadamente, utilizando herramientas como una bolsa inmobiliaria o una cartera compartida, las agencias pueden beneficiarse enormemente de esta estrategia colaborativa.
Para saber más sobre cómo funciona este sistema y cómo puede mejorar la gestión de inmuebles de tu agencia, te invitamos a explorar más detalles en este artículo sobre la bolsa inmobiliaria y la cartera compartida de inmuebles, donde encontrarás una explicación completa y consejos prácticos.
Esto puede generar conflicto si no hay un acuerdo claro desde el inicio. Normalmente, la agencia que cierra la venta es la que recibirá la mayor parte de los honorarios, pero esto dependerá de los términos pactados entre las agencias involucradas.
No, no es obligatorio. Compartir inmuebles es una estrategia opcional que depende del acuerdo entre el propietario y las agencias inmobiliarias. Puede ser una excelente opción para acelerar la venta de la propiedad, pero no es la única forma de hacerlo.
Los honorarios se reparten según el acuerdo entre las agencias participantes. Lo común es que se divida de manera proporcional, aunque cada caso puede ser diferente. Es esencial establecer estos términos antes de iniciar la colaboración.
Sí, los propietarios siempre tienen la última palabra sobre cómo desean que se gestione su inmueble. Si prefieren que solo una agencia maneje la venta, tienen todo el derecho a optar por esta exclusividad.
No es estrictamente necesario, pero contar con un sistema de gestión de inmuebles como Waytocol facilita mucho el proceso. Un CRM permite una gestión más eficiente, organizada y transparente entre las agencias que colaboran.